El virus que quiso frenar al deporte femenino
Nos encontrábamos en pleno auge, euforia incluso, del deporte femenino en el mundo en general y en España en particular. Garbiñe, Mireia, Carolina Marín, Lydia Valentín, la selección de balonmano y La Liga de Fútbol femenina acaparaban portadas, llenaban estadios y rompían audiencias.
El coronavirus ha sido un portazo. Para las deportistas cuyo objetivo son los Juegos Olímpicos la situación roza la desesperación. Son torneos que se celebran cada 4 años, así que el número de participaciones en una carrera deportiva en ellos es muy bajo. No puedes permitir perderte la cita o incluso llegar con falta de preparación. El cierre de los Centros de Alto Rendimiento en España obligó a Mireia Belmonte a abandonar el CAR de Sierra Nevada, su segunda casa, y confinarse en su domicilio; por lo que no puede progresar en sus entrenamientos. Jessica Vall, otra de nuestras medallistas, se encuentra en la misma situación. Se quejan de la imposibilidad de ejercer su trabajo que es prepararse para la competición, pero lo cierto es que los baremos para saltarse la cuarentena son exigentes
Hay casos más realistas como el de Carolina Marín, que ya expresa públicamente su opinión acerca de que los JJOO deberían ser pospuestos. Ella pone el foco en las diferencias de preparación entre las atletas de distintos países, ya que dependiendo de la situación en cada uno, podrán estar entrenando o no. Lo cierto es que este escenario, el de atletas con diferente nivel de preparación el día de la inauguración allá en Julio, sería el más positivo, ilusorio quizás.
En otras ocasiones, la naturaleza del deporte practicado es más benévolo y permite ejercitarse en casa. Éste es el caso de Lydia Valentín, que prepara la cita con moderado optimismo, atenta a las evoluciones de la pandemia.
Progresión interrumpida momentáneamente en el fútbol
A las futbolistas les llega esta pandemia en plena maniobra de despegue, una de las más complicadas del vuelo. Eran fuertes los retos a los que se han estado enfrentando estos últimos meses. Recién salidas de una complicada negociación del convenio colectivo, con huelga incluida, que culminó hace un mes con la firma del acuerdo. La situación es tan atípica que tres árbitras de la Primera Iberdrola (Judit Romano, Elena Peláez e Iragartze Fernández) son sanitarias y han tenido que volver a desempeñar su segundo oficio de manera íntegra.
En cualquier caso la evolución del deporte femenino es ya algo imparable. Ha venido para quedarse, y la propia explosión que generará la salida de una crisis como la actual, provocará un repunte incluso a cifras mayores anteriores a la crisis. Si se cumplen los pronósticos e impera la razón, las veremos el año que viene conquistando medallas en Tokyo y, por supuesto, llenando pabellones y estadios.
Campazzo somete al Barsa
El Real Madrid se impone 86 – 76 al Barcelona en la octava jornada de la Euroliga
El base argentino dominó este tremendo partido entre dos de los mejores equipos del Continente. Un encuentro con alternativas tanto en el marcador como en las fases de juego, que alternó momentos brillantes con minutos de máxima tensión; propios de un clásico con jugador estrella criado en el equipo rival, ¿les suena?
Comenzó el partido con el equipo de Laso abriendo el campo y anotando desde posiciones exteriores, donde Randolph y Campazzo encontraban aro con facilidad. Esto le permitió encontrar espacios interiores que Deck aprovechaba para remachar la ventaja que ya rondaba los veinte puntos.
El Barsa volvió con otra marcha más en el segundo cuarto, con transiciones ofensivas rápidas de Ribas y Delaney que permitían unos contra uno al espacio, en los que Tomic y Mirotic (dos ex) anotaban con continuidad. En éstas, Tavares cometió la técnica que supuso su tercera falta y acabó de limpiar la pista de despegue del equipo blaugrana, que remontó hasta acabar por delante (48-50) en el descanso.
El tercer cuarto puso nombre y apellidos al partido, Facundo Campazzo. Hoy no hizo nada distinto: dribló, penetró, tiró, asistió y defiendió. La cuestión es que simplemente lo hizo más rápido que los demás. El equipo tuvo un ritmo más alto en ambas zonas con él en pista. Esto le permitió a sus compañeros encontrar más espacios en ataque y reducir las distancias en defensa, los unos contra unos blaugranas se hicieron casi imposibles. Ventaja de 7 puntos blanca para encarar el último cuarto. Eso sí, sólo un hombre alto disponible para Pablo Laso, Tavares, y además con 4 faltas, tras la quinta falta de Mickey en el último minuto del cuarto.
Consiguió el Madrid colocar el partido en un intercambio de golpes hasta que faltaban 5 minutos para el final; dando descanso al “Facu”, cargado de minutos, y a Tavares, cargado de faltas. A su salida a cancha, el de Córdoba retomó el control del partido y ya no lo soltó hasta el final. Las pocas veces que los exteriores blaugranas escapaban a su acoso, se encontraban con la inmensidad de Tavares, que aguantó hasta el enganchón final con Delaney, que le llevaría a los vestuarios tras intercambio de técnicas y antideportivas. Todo esto a un minuto del final y ya con ventaja de 10 puntos para los locales.
Importante victoria para los blancos, en un exigente clásico contra un Barcelona repleto de estrellas, y que le sirve para reengancharse a los puestos altos de la clasificación de la máxima competición continental.
Pesic: “el Real Madrid fue mejor hoy”
El entrenador serbio reconoció que el equipo local fue hoy mejor y les faltó paciencia en ataque en la segunda parte y concentración en defensa, para batir a un rival que fue capaz de cambiar el ritmo en el tercer cuarto.
Laso: “contento con la respuesta del equipo”
El vitoriano compareció extrañado con el primer tiempo, en el que hubo un cuarto claro para cada equipo. Pero que su equipo fue capaz de reconducir en el tercer cuarto a base de concentración y acierto. Mención especial para Randolph, que jugó su mejor partido de la temporada.